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Llevamos ya casi dos meses de clases y en Guadaira, las actividades de solidaridad están a la orden del día. Al habitual reparto de alimentos que se hace los sábados por la mañana, este año seguimos con la buena costumbre que adquirimos a finales del año pasado y visitamos los domingos por la mañana un centro de discapacitados en el pueblo sevillano de Olivares.
Y además, es novedad en este curso, la participación del Mayor en la Operación de Rehabilitación de Viviendas (ORV), que era una actividad que consistía en la rehabilitación, valga la redundancia, de una casa a una persona con problemas económicos. En esta ocasión, fue una vivienda situada en los alrededores de la calle San Marcos la que un grupo de residentes ayudó a mejorar.
Guadaira vive de la solidaridad. La solidaridad nos convierte en mejor personas. Todos necesitamos de esa solidaridad. ¡Que siga el buen ritmo!
Rafael Marente Tovar [Colegial]